Empezamos con 3 años nuestra educación y cuando por fin llegamos a los estudios más altos, allá por los 30 años, nos dicen que debemos estar actualizados, que todo lo que hemos aprendido se ha quedado obsoleto. ¿Por qué? Por supuesto, a la vez que vamos avanzando de nivel la educación va cambiando con nuestro progreso, todo lo aprendido tiene valor y puesta en práctica. La historia continua, la tecnología avanza y cada vez tenemos más respuestas para todo.
El cambio siempre comienza lentamente, hasta que llega a un punto de inflexión en el que se convierte en algo drástico. En la educación todavía no hemos llegado a ese punto, no ha habido grandes mejoras significativas en varios siglos, a pesar de que la tecnología sí ha avanzado de forma drástica en los últimos 30 o 40 años. Aun sabiendo esto, vemos perfectamente la diferencia de trabajar y estudiar entre nuestros padres y nosotros, en la propia oficina se puede diferenciar la forma de trabajar según su generación. Por supuesto el avance tecnológico ha tenido algo que ver, pero algo que no nos diferencia es que todos debemos actualizarnos, debemos adquirir nuevos conocimientos y prácticas que ayudaran al futuro del trabajo y sobre todo de la educación.
Ya nos lo han dicho desde que entramos en el colegio: ¡somos el futuro! y por ello tenemos la «responsabilidad» de mejorar y evolucionar. La Escuela de Formación SEM ofrece cursos subvencionados a la empresas para contribuir en el futuro del trabajo y la educación, ¿te apuntas?
